MI VIAJE A VIENA…UNA CIUDAD CON MUCHO ENCANTO

Hola… Qué tal lleváis el invierno? Yo aterrizando todavía porque he vuelto esta semana de Viena. Por este motivo, y por otros más, he tenido más abandonado el blog este mes. Y me “reengancho” con este post sobre Viena porque vengo tan maravillada de esta ciudad que quiero compartir con vosotros mi experiencia.

Podría resumir mi viaje diciendo que de Viena me ha gustado todo. Y cuando digo todo me refiero a absolutamente todo. La gente me había dicho que era muy bonita, muy “señorial”, pero yo no quería ir con expectativas ningunas porque luego puedes decepcionarte, como alguna vez me ha pasado. Así que sin ninguna idea preconcebida fui y encantada me he venido, todos los amigos que hemos ido a este viaje y yo.

Es cierto que es una ciudad imperial con un poderío y una historia impresionante. Andamos mucho por sus calles y plazas, recorrimos muchas zonas de ella y la mayoría de los edificios, viviendas particulares y también, parecen casas-palacio. Toda la estética de la ciudad guarda plena conexión con los edificios que realmente sí son palacios o similares. Y es tan bonita…que sólo pasear por ella ya tiene mucho encanto.

También es una ciudad poco ruidosa, con gente tranquila, una ciudad tranquila, limpia y con mucha luz. A pesar de ir en Enero, de que nos nevó un día y llovió algo otro, pudimos recorrerla igualmente bien y no pierde su encanto para nada. No la he visitado en verano pero en invierno desde luego la recomiendo.

Hay sitios que recomiendo visitar que nos han gustado mucho como los palacios de verano e invierno de los Habsburgo, donde vivió la emperatriz Sissí. Una mujer que no fue en muchos aspectos la que nos mostró el cine con las películas que se hicieron de ella. Escuchamos con las audioguías que te dan en los palacios muchas historias y anécdotas de su vida, y es un personaje histórico que a mí me ha impactado mucho. Fue una mujer muy avanzada a su tiempo, muy espectacular porque medía un metro setenta (por entonces era algo que llamaba mucho la atención) pero que nunca pesó más de 50 kilos. Parece ser que vivió obsesionada con su imagen, se sometía a estrictas dietas, a muchísimo ejercicio físico y muchas horas dedicadas a su larguísimo cabello (le llegaba casi a las piernas), cosa que le ocasionaba fuertes migrañas. No se adaptaba a la vida de la Corte, era un espíritu libre que no llegó a encontrar su sitio, que se lamentaba de su vida y no quería vivirla, y al final fue asesinada con 62 años. Y hay muchas cosas de la ciudad que giran en torno a ella.

También hay muchas cosas de Viena que giran en torno a la música, ya que es la capital imperial de la música clásica. Recomiendo mucho que si la visitáis que vayáis a algún concierto. Nosotros fuimos a la Ópera y vimos La Cenicienta con la Orquesta Filarmónica de Viena. La experiencia fue alucinante y el lugar impresiona mucho.

Otro sitio que nos encantó fue la Biblioteca Nacional Austríaca, con más de ocho millones de documentos, libros antiguos, mapas y papiros, muchos de la Casa de Habsburgo, frescos y globos terráqueos antiguos. Es una pasada estar en su gran sala.

El Palacio Belvedere, convertido en museo, también es muy chulo para ver, sobre todo porque tiene obras de Gustav Klimt, entre ellas “El Beso”. Y a mí, que me encanta este pintor y que tengo varias pinturas de él en mi casa, me hizo mucha ilusión verlas. También hay de Van Goh y de muchos más pintores conocidos.

La Catedral de San Esteban es el edificio religioso más importante de Viena y es, como todas las catedrales, majestuosa e impresionante. Preciosa por dentro y por fuera. Está en la plaza de San Esteban, muy bonita también. Bueno…en realidad es que todas las plazas de Viena tienen mucho encanto.

Con respecto a la comida, tienen cosas típicas de carne. Y para los menos o nada carnívoros tienes también bastantes opciones. A nosotros nos ha gustado mucho todo lo que hemos comido y nos han atendido, en general, muy bien en todos los sitios. Sólo decir que los precios de cualquier bebida (agua, cerveza, cafés, infusiones,…) son abusivos, pero esto, como en la mayoría de las ciudades europeas.

Resumiendo, os recomiendo muchísimo la visita a esta ciudad. Y si hacéis el viaje, como lo he hecho yo, en muy buena compañía, el sabor con el que vienes es todavía mejor. Viene una feliz y con ganas de todo…

Espero que os guste mucho este post, que va especialmente dedicado a mis estupendos seis compis de viaje.
Os deseo muy buena semana y nos vemos por aquí la semana que viene!